«Las Musas» están en todas partes, en todos y en todo momento pero hay que estar atento y predispuesto a verlas porque su visión no es fácil y aun menos su representación, para mi es difícil sustraerme de una imagen sugerente y cautivadiora que sirva a mis propositos de representar la fluidez de la vida, el sentido y la esencia de «todo» en el universo, las proporciones en el universo y en nuestro planeta de todos los seres que siempre han cautivado a los artístas ahora cautivan otra vez a los matemáticos y científicos al darse cuenta que existe un patrón y una proporción establecida en la belleza y en la naturaleza que explican con la existencia del número áureo (este número fue descubierto ya en la antiguedad porque se alojaba en las proporciones de las cosas más bellas, ahora está otra vez de moda porque lo universal nunca muere) aunque yo me quedo con la forma universal que ejemplifica esto: la espiral, el remolino, el vórtice…. de donde venimos y a donde vamos, se encuentra en todo, da vida y muerte a todos, forma las galaxias y las rige, lo podemos ver en una tormenta como tornados y huracanes, en los rios y mares en forma de remolinos y en nuestro fregadero, en un caracol, en un nautilus, hasta en nuestro oido interno etc…la biodinámica conoce bien los efectos vivificantes de los vórtices, de los remolinos, de la espiral y para mi es el origen de «todo» y por la cual todo se rige. la parte derecha de nuestro cerebro sabe muy bien de proporciones y curvas y le encanta apreciarlas porque son la esencia de todo. Está bien desentrañar y racionalizar pero mucho antes de que eso pasase ya se deleitaba el ser humano con la mera visión de esta proporción en todo lo que les rodeaba, a la definitiva el fin de todos estos estudios pierde su sentido si no sabemos deleitarnos con la esencia de sus formas.