COMO EXTRAER ACEITE ESENCIAL DE TOMILLO CON ALAMBIQUE

Se va acercando mi cumpleaños y el otro día mi chico me sorprendió regalándome un precioso alambique de cobre para que pueda extraer mis propios aceites esenciales de las plantas medicinales que hemos ido plantando en nuestra huerta ecológica. Así que como estos días el tomillo está en plena floración hemos hecho recolección y nos hemos puesto a «alambiquear» un poco. Se me ha ocurrido que sería buena idea hacer un paso a paso para mostraros como funciona, porque por lo menos para mí, ha sido un proceso «milagroso» y muy entretenido.

  • Limpieza

Primero se llena el alambique hasta la mitad y se le añade un litro de vinagre. Se montan todas las piezas y se sellan las uniones con engrudo (mezcla de harina y agua), para que no pierda vapor.

Alambique montado

Alambique montado

Después se pone al fuego y se espera a que vaya saliendo el líquido por el serpentín. Nosotros le hemos añadido un tubo de cobre largo para que el hidrolato caiga en un bote que elevamos con una silla. Cuando lleve más o menos un cuarto de hora saliendo agua, se apaga el fuego y se deja enfriar.

  • Añadir las plantas

Como mi alambique no consta de rejilla, hemos preparado una nosotros con una malla metálica que hemos desinfectado previamente. Esto hace que las plantas no estén en contacto directo con el agua y que los aceites se separen solo por evaporación. También puede llenarse el fondo de la caldera con paja para este mismo fin. Después de poner la rejilla se llena la caldera de agua hasta la rejilla. Se debe utilizar agua de pozo, mineral o de fuente, mejor si no es del grifo.

fotos alambique 001

Ahora ya podemos llenar la caldera con las hierbas que queramos destilar, en este caso nosotros hemos usado tomillo.

Alambique lleno de tomillo

Alambique lleno de tomillo

  • Destilar

Ahora es el momento de colocar el capacete y unirlo al serpentín. Como he explicado al principio es muy importante cubrir las juntas con engrudo para evitar las fugas. Se coloca al fuego y a esperar. Ahora es el momento de llenar la cubeta que contiene el serpentín con agua fría. A medida que el vapor vaya pasando por el serpentín ese agua subirá mucho de temperatura, por lo que hay que intentar que se mantenga más o menos fría. Nosotros lo que hemos hecho ha sido ponerle una manguera que va añadiendo un flujo constante de agua fría y luego otra manguera cebada que va sacando la misma cantidad de agua caliente. También se puede dejar que la cubeta se vaya sobrando poco a poco si lo haces al exterior.

Y cuando llevas un ratito, como por arte de magia, esto es lo que ocurre:

Hidrolato y ae de tomillo

Hidrolato y ae de tomillo

Como podéis observar el aceite esencial se va quedando en la superficie con un color dorado, y el resto es el hidrolato que tiene una tonalidad blanquecina.

Cuando deje de salir hidrolato, se apaga el fuego y se deja enfriar el alambique. Como nosotros observamos que casi todo el ae sale al principio, en la siguiente tandada que hicimos no lo dejamos hasta el final, sino que lo apagamos cuando vimos que la cantidad de ae ya no aumentaba.

  • Separación del aceite esencial y del hidrolato

Esta es la parte más engorrosa, ya que hay que recoger el cae con un cuentagotas, con mucha paciencia y meterlo en un botecito. Para que os hagáis una idea, nosotros hemos sacado más o menos 8ml de aceite esencial. Sí ya sé que es poco, pero has cultivado tus plantas, no tienen ningún residuo químico, las has destilado tú, el olor es ¡¡¡uummm!!! y eso no tiene precio.

  • Etiquetar y conservar

Y este es el resultado:

Hidrolato y aceite esencial de tomillo

Hidrolato y aceite esencial de tomillo

Espero que os haya gustado esta entrada y que si podéis os animéis con el alambique, es una gozada.